miércoles, 30 de noviembre de 2016

resignación y jamón

Se acerca la Navidad, esa sensación entre resignación y jamón

Una mezcla entre ilusión, resignación, ganas de salir corriendo y cierto repeluco. Así es la Navidad con esta edad. Así es la Navidad con mi edad. Así es la Navidad cuando ya eres madre, cuando ya has trabajado por cuenta ajena y cuenta propia. Cuando has recibido regalos de todo tipo, desde chaquetas de cuero tipo aviador, vales por, teléfonos, carbón, bragas, bufandas, libros, lego mucho lego, la ruta del tesoro en vez del monopoli, la Nancy china en vez de Selene.... Cuando la has celebrado fuera y dentro de casa. No recuerdo una nochevieja que me lo pasara espectacularmente bien- que fuera mi mejor noche. La Navidad me da miedo: las peladillas, los orejones, los roscones duros, las movidas familiares, las ausencias, las presencias... ufff La Navidad me da repeluco, la lotería de Navidad y los cánticos de los niños, a mi no me producen ternura, me dan grimita. Las cenas Navideñas con la empresa y no poderte sentar al lado de la persona correcta. La gente muy borracha diciéndote a la cara lo que siente. agggg !!! y bueno me queda los recuerdos de cargar con el jamón desde el curro en el metro con mi compañero David haciendo que tocabamos la guitarra, siempre hacía mucho frío...

Y la ilusión, eso si por los niños y por mi, que ser madre no hace que me quite las ganas de tener regalos y de buscarlos por casa... la ilusión por lo nuevo, por desenvolver... ays como me gusta..